SUERO AUTOLOGO
UTILIZACIÓN Y FUNCIONAMIENTO
La utilización del suero autólogo es una opción terapéutica para el ojo seco. El suero autólogo es un preparado a base de tu propia sangre centrifugada a 3.000 rev/minuto
La utilización del suero autólogo en oftalmología viene marcada por la necesidad de encontrar sustitutos lagrimales que, además de humidificar, aporten otros componentes presentes en la lágrima y que se encuentran disminuidos en casos de ojo seco.
Los efectos del suero autólogo sobre la superficie ocular van a venir determinados por sus numerosas propiedades. En este sentido, el suero presenta unas características muy similares a las de la lágrima en cuanto a pH y osmolaridad. Al igual que ésta, contiene abundantes factores de crecimiento y bactericidas que hacen que el tratamiento con suero autólogo tópico no sólo humidifique la superficie ocular sino que, además, aporta factores nutricionales y de crecimiento, necesarios para mantener la viabilidad celular en los procesos de reparación epitelial, y componentes bactericidas que reducen el riesgo de contaminación e infección.
Los efectos beneficiosos de este tratamiento en los defectos epiteliales persistentes comienzan a notarse a partir de la segunda semana de tratamiento, aunque la mejoría subjetiva de los pacientes empieza prácticamente desde el segundo día.
INSTRUCCIONES DE CONSERVACIÓN Y ADMINISTRACIÓN DEL COLIRIO DE SUERO AUTÓLOGO
Este colirio está preparado a partir de suero de su sangre y no contiene ningún tipo de conservante para evitar problemas de toxicidad sobre la superficie ocular. Por este motivo, es fundamental que siga correctamente las siguientes instrucciones con objeto de evitar la contaminación del producto:
- 1. Se le suministran varios frascos de colirio de Suero Autólogo.
- 2. El frasco que esté usando se debe mantener en la nevera. Los restantes deberán conservarse en el congelador hasta el momento de su utilización. La estabilidad del colirio en el congelador es de tres meses.
- 3. Debe aplicarse el colirio de 6 a 10 veces al día, según lo indicado por su oftalmólogo. Es suficiente con que se instile una gota cada vez.
- 4. Previamente se lavará las manos y, al instilarlo, tendrá cuidado de no tocar el extremo dosificador con los dedos o de rozar las pestañas y menos el ojo.
- 5. Cada frasco se empleará sólo durante siete días.